1867 : La fundición inglesa de Chañaral tenía 13 hornos de fundición y exploasba las mejores minas de Animas. Apiolaza, Pablo Rubio (2010) : "Uno de los primeros establecimientos se instaló en 1867, fecha en la cual llegó a la zona el empresario minero Federico Varela, quien además de comprar las minas más ricas de Ánimas, colocó una casa compradora de metales. Luego Varela vendió su establecimiento a la Compañía de Minas y Fundición de Chañaral (1872-1883). En cuanto a este establecimiento, cabe señalar que contaba con un equipamiento bastante respetable, entre los cuales se cuentan las extensas canchas de acopio de minerales que admitían más de 40.000 quintales métricos y carboneras desde 3.000 a 4.000 toneladas de carbón de combustible. Además, de acuerdo a un contemporáneo, poseía 13 hornos de fundición, distribuidos en cuatro hornos de reverbero servidos por una chimenea de 120 pies de altura; cinco hornos de reverbero, cada uno con su chimenea, tres hornos para calcinar bronces y un horno de manga.

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Título de la anotación
La fundición inglesa de Chañaral tenía 13 hornos de fundición y exploasba las mejores minas de Animas
Cita
Uno de los primeros establecimientos se instaló en 1867, fecha en la cual llegó a la zona el empresario minero Federico Varela, quien además de comprar las minas más ricas de Ánimas, colocó una casa compradora de metales. Luego Varela vendió su establecimiento a la Compañía de Minas y Fundición de Chañaral (1872-1883). En cuanto a este establecimiento, cabe señalar que contaba con un equipamiento bastante respetable, entre los cuales se cuentan las extensas canchas de acopio de minerales que admitían más de 40.000 quintales métricos y carboneras desde 3.000 a 4.000 toneladas de carbón de combustible. Además, de acuerdo a un contemporáneo, poseía 13 hornos de fundición, distribuidos en cuatro hornos de reverbero servidos por una chimenea de 120 pies de altura; cinco hornos de reverbero, cada uno con su chimenea, tres hornos para calcinar bronces y un horno de manga. Si bien los testimonios admiten que sólo funcionó una parte de esta infraestructura, no deja de sorprender su capacidad (..)
« Sucesivamente, esta empresa pasó a la Compañía Inglesa de Minas, también llamada la “Inglesa” (1883-1899) y a la Copper Corporation of Chile (1899-1908). Esta última se inició en Chile con una inversión de 200.000 libras, pero a un año de su funcionamiento debió paralizar por falta de mineral para fundir, por la nula protección que tenía con los mineros, quienes eran permanentemente expoliados por esta Compañía, en un rasgo que se constituirá como una continuidad (El Constitucional 1 de abril de 1899, 1 de septiembre de 1900).
Fecha a la que se refiere
1867
 
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