Tani, Aparicia, "Viruela en Pullipata. Comunidad tomaraho María Elena, 2003". 2003 : Com Indig Puerto Maria Elena (Pitiantuta) (Alto Paraguay, Paraguay)

 Interview: id 36189
Interviewee(s)
Interviewer(s)
Language spoken
tomaraho
Date of interview
2003
Unique public identifier
tomarahoAT2003a
Orígen del documento
Subject description
Viruela en Pullipata. Comunidad tomaraho María Elena, 2003
Transcription
Cuando era una niña murió mi mamá. Estaba mi papá, pero él no me reconocía como su hija. Yo andaba con mi tía y mi tío, la hermana de mi mamá. Anduve con ellos hasta que crecí y tuve como diez años. Estuvimos en distintas partes, hacia Pitiantuta y después de Pitiantuta a Jipokarnish. Esa era una aldea, otra aldea. Después fuimos a Ountakaya, ésa queda lejos. No sé dónde nací, mi madre murió cuando tenía dos o tres meses, fue mi tía la que me dio de mamar. Koob era mi padrastro. Yo anduve con mi tía hasta que crecí y a él lo reconocí como mi papá. Mi padre me abandonó y crecí con mi tía hasta que tuve como doce años. No había paradero fijo, sino que nos instalamos en un lugar y cuando se acababa la comida nos íbamos a otro lado. Entonces llegamos a un lugar que se llama Pullipata. En ese lugar nos quedamos un tiempo.
Cuando llegamos a Pullipata, entonces llegó una enfermedad nueva, una enfermedad inmensa que se llamaba viruela. Llegó ese enfermedad inmensa y mató a todos los tomaraho. Muchos se murieron, casi todos se murieron con esa enfermedad. En esa época yo tenía como 14 años. Estaba mi hermana, Ñerke [madre de Emilio]. Nosotras tomamos pólvora, mi papá tomó agua y le echó pólvora y tomamos y por eso la enfermedad no nos agarró. Nos salvamos porque teníamos esa defensa, ese veneno para proteger. No comíamos la comida de los paraguayos como el arroz, sino que comíamos el ahorr’, que es como una mandioca de abajo de la tierra. También comíamos opihé, que es como una fruta del monte. También osarwo, como carandilla o palmito. Y también osymyrr, que es como caraguatá, pero no es caraguatá. Se le come la raíz, es riquísimo. Cuando tenía 14 o 15 años no conocía la comida paraguaya. Mi tía llevaba un fósforo e incendiaba las caraguatá, para sacarles la cabeza y comérselas. Las hojas no sirven, solo la cabeza del tronco, el tronco es como un batata. No había otra clase de comida, solo eso comían, esa comida típica los protegía. Los que comieron la comida de los paraguayos, esos murieron toditos. Sólo la comida de antes protegía a la comunidad.
Antes que llegara la enfermedad vino un doctor a la aldea. Pero había un joven que se llamaba Conito, un tomaraho, y Conito les prohibió a los doctores entrar en la aldea. Conito era hijo de anábsor [diabólico]. El prohibió la entrada de los doctores a la aldea indígena. Antes había muchísima gente, no sé cuánta, pero mucha. Muchísimos murieron, unos pocos apenas fueron los que se vacunaron. Los otros murieron todos.
Todos se fueron juntando en un sólo lugar, en Pullipata, ahí se fueron juntando todos en un sólo lugar. Recuerdo que si uno iba a jugar donde sus parientes ya se perdían, no sabía más dónde estaba su casa, así de grande era Pullipata. Había mucha gente, era más grande que Bahía Negra o que Puerto Esperanza. Cuando alguien iba a cazar un jabalí, al volver se sentaba ahí en su asiento y ahí mismo moría sentado. Se sentaba en su asiento y se moría ahí. Rápidamente. Hasta los árboles se secaron con esa enfermedad. Murió mucha gente y los perros empezaron a comerse a la gente que estaba muriendo. Y los perros también se morían después. Nadie cavaba, mucha gente murió, nadie hacía un pozo, la gente moría así nomás.
Mi tío se llamaba Agsun y yo andaba con mi tío y con su esposa y su hermana. Ellas murieron. Mi tío se fue cerca del pueblo de los paraguayos. Todo el resto, los que ya estaban recuperándose o aliviándose, esos se fueron cerca de los paraguayos para que les dieran algún remedio.
Yo tenía quizás catorce años. Yo vi cómo se enojó Chicharrón con Conito. Conito había prohibido a los doctores que entren en la comunidad. Entonces Chicharrón estaba muy triste. Él recordaba a sus parientes que habían muerto, muchos. Recordaba a su padre, a su madre, a sus parientes y a los otros tomaraho que habían muerto y se enojó muchísimo con Conito. Porque fue su culpa, él fue el que no dejó pasar a los doctores y después llegó la enfermedad y murieron muchos. Chicharrón mató a Conito. Con una escopeta. Lo mató y lo tiró al río.
Conito era una persona mala. Es hijo de anabsor, no es un amigo ni como cualquier tomaraho. Su madre es tomaraho, pero él no tenía amigos ni parientes. Él no quería saber nada. Cualquier persona él la desafiaba, a cualquiera lo quería matar, lo desafiaba. Entonces chocó con Chicharrón y Chicharrón mató a Conito y echó a su hijo, que se llamaba Kutsé. Kutsé, el hijo de Conito se fue y se juntó con los ybytoso cuando su padre murió. El resto de los tomaraho festejaban, festejaron la muerte de Conito, porque era una persona mala. Nadie lo quería. Los tomaraho festejaron porque había muerto el hijo del diablo. Conito era un demonio. Entonces la comunidad quedó libre. Algunos se fueron hacia Ountakaya, otros se separaron, otros se fueron a Yimitpata. Nosotros nos fuimos a Ountakaya, cerca del km 45 [del tren de Casado], éramos como veinte familias. Esa fue la primera vez que vi los bueyes y las vacas.
 
Related
traducción
Linked from
Referenced by
more...