1884 : El Morado. Aracena, Francisco Marcial (1884, 38) : "l único mineral de alguna importancia que posee Caldera en sus inmediaciones es el Morado, cuyas minas principales son explotadas hoy con regulares rendimientos por el caballero alemán don julio Barth. Las explotaciones de las minas del Morado son fundidas en el establecimiento de Caldera o en el Tierra Amarilla, de la casa de Edwards, al interior de Copiapó. En algunas ocasiones, el señor Barth envía la producción de sus minas al inmediato puerto de Chañaral de las Ánimas, donde sus metales casi siempre son solicitados con el mayor interés por ser en su mayoría sulfurosos. El Morado fue descubierto hace 40 años aproximadamente por el célebre don Diego de Almeida, el gran domador de desierto. Las minas del Morado en su mayor parte han sido riquísimas, pues han dado ingentes cantidades de minerales y, por consiguiente, también de pesos. Hoy día arrastra una existencia harto efímera, como la mayor parte de los cen-tros mineros que hace treinta o cua
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Número de página
38
Título de la anotación
El Morado
Cita
l único mineral de alguna importancia que posee Caldera en sus inmediaciones es el Morado, cuyas minas principales son explotadas hoy con regulares rendimientos por el caballero alemán don julio Barth. Las explotaciones de las minas del Morado son fundidas en el establecimiento de Caldera o en el Tierra Amarilla, de la casa de Edwards, al interior de Copiapó. En algunas ocasiones, el señor Barth envía la producción de sus minas al inmediato puerto de Chañaral de las Ánimas, donde sus metales casi siempre son solicitados con el mayor interés por ser en su mayoría sulfurosos. El Morado fue descubierto hace 40 años aproximadamente por el célebre don Diego de Almeida, el gran domador de desierto. Las minas del Morado en su mayor parte han sido riquísimas, pues han dado ingentes cantidades de minerales y, por consiguiente, también de pesos. Hoy día arrastra una existencia harto efímera, como la mayor parte de los cen-tros mineros que hace treinta o cuarenta años florecieron en las cercanías de Calde-ra. Algunas de las pertenencias del Morado son propiedad de la casa de Edwards, que es como si se dijese que no pertenecen a nadie, pues no se preocupa esta opu-lenta casa en dar amplio vuelo a esta importante industria, a pesar de tener tanto en Chañaral de las Ánimas como en Punta del Cobre, al interior de Copiapó, valiosas pertenencias mineras que han dado a sus anteriores dueños, y aun a la misma casa de Edwards, verdaderos cerros de minerales. Más adelante entraremos en más pormenores referentes al comportamiento de la casa de Edwards para con la industria cuprera.
Fecha a la que se refiere
1884
Se refiere a